Talavera a 17 de agosto de 2002

 

ARTICULO DE OPINION

NUESTRA RESPONSABILIDAD EN EL “ESPERPENTO” ARGENTINO

 

Los informativos nos sorprenden con una noticia que, si no fuese por lo doloroso de la situación, nos daría por pensar en una película surrealista o una broma, eso si, de muy mal gusto.

En la televisión argentina celebran un concurso en el cual el premio es un puesto de trabajo, pocas veces se ha denigrado tanto a los seres humanos. Lo que debería ser un derecho inalienable de las personas, como es el acceso a la educación, a la sanidad, etc... te lo presentan como una “bendición” digna de una barraca de feria.

Y lo curioso sería contemplar si acaso alguna de las empresas que ofrecen tal puesto de trabajo no será cualquiera de las causantes de la miseria, el caos y la desgracia que se ceba sobre la mayor parte del pueblo argentino, la otra parte es la de los corruptos, sinvergüenzas y ladrones que han llevado a tal situación a una nación que ha sido considerada como el “granero” del planeta.

Pero claro, como se dice vulgarmente, no habría corruptos si no hubiera corruptores. Y en ese momento aparecen las grandes corporaciones, no porque la clase dirigente argentina no estuviera dispuesta a la “coima”, ya que eso ha sido moneda corriente en esa y otras esferas del poder, pero si porque aparece las multinacionales, entre ellas las enviadas desde la madre patria, y comienza la esquilmación del estado argentino.

Los sucesivos gobiernos españoles y sus homónimos criollos despliegan  sus tentáculos y hacen de la privatización de empresas estatales el gran negocio, para todos menos para las clases medias y bajas (la mayor parte del pueblo).

La lectura de un libro de investigación, escrito por periodistas argentinos (uno de ellos nieto de una emigrante española), y que está teniendo cierto eco, a pesar de su nula publicidad, <<Los nuevos conquistadores>> de Daniel Cecchini y Jorge Zicolillo (Editorial FOCA), desgrana en sus páginas el proceso seguido para llegar a la situación actual. Y en ese proceso están inmersos todas las esferas del poder tanto argentino como español, y al decir todas es TODAS.

Sin ser exhaustivo en la relación de empresas que fueron vestidas de gala para después ofrecerlas los nuevos dueños se podían señalar unas cuantas en las que la práctica totalidad de los pasivos fueron absorbidos por el Estado y de esa forma garantizar un buen precio a los compradores. Entre ellas ENTEL que, “licitadas” a Telefónica de Argentina y Telecom, se hicieron cargo de 380 millones de dólares mientras el Estado asumía los 1790 restantes. La petrolera estatal YPF acumulaba un pasivo de 11300 millones de dólares, de los cuales el 75,5 % (8540) fueron asumidos por el Estado mientras la empresa se hizo cargo del resto. Y así la lista interminable, la empresa estatal de Servicios Eléctricos del Gran Buenos Aires (SEGBA), la de Gas del Estado, las Aerolíneas Argentinas, etc. Todas ellas tuvieron la cálida acogida de las empresas españolas cómo Repsol, Telefónica de España, Endesa, Aguas de Barcelona, Gas Natural, BBVA o BSCH.

Argentina no había pasado a ser un país del Primer Mundo, había pasado a ser propiedad del Primer Mundo.

Toda esa corrupción no se ha expurgado, se pide más ayuda al Fondo Monetario Internacional, al Banco Mundial, etc. En suma se busca solución en los lugares que son parte fundamental del problema. Dinero que si llega y no vuelve a ser “distraído” por los mismos corruptos, sólo servirá para aumentar la deuda.

Mientras la crisis sacude al país vemos al presidente Duhalde pasear por los jardines de su mansión, al expresidente Carlos Menem actor principal en el saqueo de la nación postularse para un nuevo proceso electoral.

Pero como vamos a pedir que se depuren responsabilidades si los que las tienen que aplicar son los dueños del “chiringuito”. La solución.........

 

 

 

Fdo. Emilio Sales Almazán

Coordinador Local de Izquierda Unida – Talavera